jueves, 22 de mayo de 2014

Katuay Café




      “Esos son mis ahorros” me decía Roberto Carosi un inmigrante italiano, quien era mi suegro, y me señalaba sacos de fique llenos de café en pergamino, cultivado en su finca, en su hogar, pues, ahí vivía, en el sector “El Ojito” del actual municipio Guásimos del estado Táchira; continuó cultivando café hasta que lamentablemente partió de este mundo. Recuerdo que poco después, que lo conocí, orgullosamente me mostraba el cultivo, sus tanques para fermentar y lavar el café, la despulpadora o el descerezo, cómo también se conoce en esta región; me mostraba cómo secaban, el café, al sol, extendiéndolo en el patio y veía el esmero como le pasaban unos rastrillos de madera, tanto él, cómo la nonna, para hacer el secado uniforme. Tenía un cuarto especialmente dispuesto, para guardar el café en pergamino; es decir, una vez seco, se guarda en sacos de fique; hoy en día pienso que era su banco personal, pues eran sus ahorros.

     Años después que mis suegros habían desaparecido “físicamente” decidí entrar al mundo del café: Recuperando el cultivo, renovándolo, y llevarlo hasta el tostado. Reconozco que inicialmente, no sabía literalmente nada, pero tomé la decisión de aprender, busqué a quienes podían enseñarme, y el que busca encuentra. Inicié vendiendo el café molido a mis amistades y pequeños negocios, pequeños restaurantes, etc., posteriormente comprendí que podía inclusive darle un valor agregado al producto, que podía ofrecer el café en taza, y es aquí donde tomé la decisión de iniciar con mi tienda de café especial, de café gourmet. Quería darle a mis futuros clientes un excelente café, en un excelente ambiente, entonces debía aprender a preparar una excelente taza, que combinado con una excelente materia prima: cultivo propio de café; daría un excelente resultado. Viajé a Bogotá – Colombia, estuve en la Escuela Colombiana del Café y comencé mi formación como Barista: Un término de origen italiano, de il bar, es decir el barista, es quien atiende il bar, y es especialista en la preparación de cafés a base de espressos. De esta manera al llegar de Bogotá, nació: Katuay Café, el nombre deriva de una variedad de arábica, llamada Catuaí, el cual tiene cerezas rojas y amarillas, en el cultivo hay catuaí amarillo, de ahí el porqué de nuestro nombre. Katuay Café es un lugar donde puedes degustar un café de origen: cultivo propio, tostado en la tienda y preparado con técnicas de barismo, así podrás conversar agradablemente acompañado de muy buena música de fondo, intercambiar libros, contemplar hermosas pinturas: es galería de arte. En definitiva múltiples factores, que en conjunto con el café, intervienen para relajarte y disfrutar de un café especial.


José Luis Araque
Barista

Katuay Café: Vía Panamericana F – 24, sector “El Ojito” Mcpo. Guásimos, Táchira - Venezuela

Twitter: @Katuaycafe

Facebook: Katuay Café